lunes, 24 de mayo de 2010

Brasil-Italia 1994. Los mejores momentos televisivos de los mundiales. (4)

“Cuando fui hacia el punto de penalti estaba todo lo lúcido que se puede estar en esos momentos. Sabía que Taffarel se tiraba siempre, por eso decidí tirarlo al medio, a media altura, justo para que no pudiera despejarlo con los pies." -Roberto Baggio-




Vaya por adelantado que Brasil levantó la copa. El equipo tenía la mitad de talento que el de España82 pero supieron sacar provecho de un centro de campo físico y de contención con Mauro Silva, Dunga y Mazinho y una dupla de delanteros, Romario y Bebeto, muy eficaz.

En aquel Mundial los partidos se jugaban a pleno sol teniendo en cuenta el horario europeo. Donde hay patrocinador no manda el futbolista, y ademas los yankees estaban más pendientes del asunto O.J. Simpson que del futbol. Nosotros como europeos disfrutamos de aquella noche de verano fente al televisor y con un cubata en la mano, contemplando como esos figurines por una vez se ganaban su sueldo.

Estadio Rose Bowl de Pasadena. 12.30 horas, hora local. Ni un techo en la tribuna, ni una sombra. 90mil espectadores. Y cuanto más avanzaba el partido más calor hacía, los jugadores aprovechaban cualquier interrupción del juego para beber agua y cuando se la echaban por la cara, parecía que salía vapor, como si fuera una plancha.
Empate a cero en el tiempo reglamentario, empate a cero al final de la prórroga. Por primera vez se iba a decidir al destino de los penalties quién sería el campeón del mundo. Los brasileños estaban en la banda, todos agarrados de los hombros, haciendo piña y mirando al cielo cada dos por tres, como invocando a Dios, o a Jesucristo porque esta gente es evangélica, creemos.
Llegó el turno de Roberto Baggio, il divino, el único artista en un equipo de gladiadores. Si Baggio erraba el penal, Italia perdía. Roberto falló.
Pero quedémonos con la versión que dio Baggio a la televisión brasileña Globo recientemente:

Nunca había cobrado un penalti por encima de la arquería. Creo que fue Ayrton Senna quien tomó aquel balón por lo alto. Creo que fue él quien hizo que Brasil venciera

En ese momento quise cavar un foso para esconderme. Después, pensé que como Brasil tiene muchos más habitantes que Italia, hice más personas felices con ese cobro
.

Estamos con Baggio al ciento por ciento porque:
Primero, Ayrton Senna murió dos meses antes de aquel penalty en el gran premio de San Marino que es casi decir Italia
Segundo, la muerte de Senna fue más impactante y más llorada en Brasil que la de Lady Di en el Reino Unido, por hacer una comparación frívola.
Tercero, Roberta Baggio era entonces y sigue siendo budista.
Cuatro, millones de brasileños que seguían los penaltis por television miraron en aquel momento al cielo e invocaron el espíritu de Senna.
Y quinto si hay que elegir entre la leyenda y la realidad, escoge siempre la leyenda.

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